Jimmy Molina
Reportero
Luego de la intervención de la Unidad del Mantenimiento del Orden para el desalojo del alma mater el pasado 14 de marzo, las negociaciones para la apertura de más cupos quedó descartada por las máximas autoridades.
Este 28 de marzo la Comisión de Nuevo Ingreso (CONI) retomó sus actividades en la lucha por la apertura de 437 cupos para los bachilleres que han quedado fuera.
Un grupo de bachilleres apoyados por esta organización paralizaron el tráfico vehicular fuera del recinto, en el carril de occidente a oriente provocando molestias en los automovilistas con el argumento de que las autoridades universitarias escucharan sus peticiones.
Pero ante la negativa de las autoridades de entablar una nueva negociación con estas organizaciones algunos aspirantes se declararon a partir del lunes en huelga de hambre.
Los manifestantes que se rehúsan a proporcionar su identidad, han instalado dentro de la universidad sus tiendas de campaña, colchonetas y botellas con agua, ante la mirada de los vigilantes que supuestamente no permitirían el ingreso de personas ajenas al recinto.
El motivo es presionar a las autoridades para que se acepte el estudio de la comisión de junta directiva conformada según el artículo 261, de la fecha 28 de febrero de 2011, en el que se acordaba la apertura de más cupos para los bachilleres que habían quedado fuera.
Las máximas autoridades hasta el momento mantienen su postura de que el proceso ha quedado cerrado y la problemática ya no les concierne por la decisión ya tomada, aunque todavía no han sentado postura por este nuevo hecho.
Los demandantes aseguran que no descansarán hasta que sean escuchados y que continuarán con más actividades.